PODER PARIR CON AMOR
Actualizado: 23 mar 2020
Por Victoria Lagos, Argentina
TMM certificada
El nacimiento de Jazmín de Luna
Nunca imaginé lo hermoso y conmovedor que podía llegar a ser parir…dar a luz…alumbrar…abrirse…traer vida…
Noche de lunas y de hechizos
Dejar el miedo atrás y seguir, dejar de pensar y sentir, el dolor lentamente me va tomando y a su vez me va tomando una fuerza desconocida, una fuerza como de otro ser en mi ser, y siendo la que soy dejo de serlo para transformarme en gemidos, gritos, voces que afloran desde mi centro, un cuerpo diferente pero siempre el mismo… o no… ya no es el mismo. Me derramo en fluidos, me deshojo en suspiros, mi peso me lleva hacia abajo, y me arrodillo, en cuatro apoyos, en cuatro patas, como un animal sí. Y se acercan en la noche felinos maullidos, como si fuese una noche de hechizos. Cierro los ojos y es como si hubiese llorado para adentro y entonces siento que se va abriendo, tan lento, mi cuerpo. Me contengo, no quiero soltar todo lo que llevo por dentro, siento vergüenza de lo que me duele muy atrás, en mi cuerpo y en mi vida. Una mujer, una madre-luna, me acompaña, me acaricia, me sostiene, se duerme pero no, está ahí, en silencio, su presencia me abraza, se recuesta al lado mío y no me observa, simplemente es…mi doula, Marcela, pasa horas así, acompañando esta transición. Escucho en un momento a mi amor, le dice a Marce en voz baja si me puede abrazar, acariciar…ella responde algo así como que me pregunte, o pruebe si yo así lo deseo. Me enternezco, pero inmediatamente regreso a mis adentros, viene una nueva contracción, de esas que desde las 23hs hasta las 2am en que llega mi doula, no se han detenido más…es que yo misma desee desde el día anterior que esto ya no se detuviese, que Jazmín venga, que llegue el momento de verla y abrazarla. Y ahí estamos los tres, y Jazmín por dentro…en una noche de luna menguante, sacando una “o” en cada contracción, y me tiembla la voz y sigo, esto recién estaba empezando.
Sacar la mierda
“No puedo Marce” exclamé…y sentía que se me rompía el alma tratando de sacarme todo aquello que ya no servía…sentada en el inodoro, agarrándome de una sábana que mi doula había colgado en la puerta del baño y con la cual hacía ella misma el contrapeso del otro lado… “está bueno venir al mundo sacando toda la mierda, dale” me decía ella y me alentaba… ¿qué era aquello que tanto me dolía y que no podía soltar? Era una fuerza que me cerraba, que me detenía… pero salía, de a poquito iba sacándome esa mierda que me perseguía hasta hoy… esos miedos y fantasmas, y la supuesta imposibilidad propia de vivir ya sin ella.
Romper bolsa: algo explota dentro mío
Tenía que liberar a mi bebé de la mierda y regalarle y regalarme ese nuevo comienzo florido que tanto esperamos… una contracción más y la sensación de que algo viene a soltarse pero nada, espero la siguiente, no me quiero ir de ahí sin sacarme ese peso de encima…la fuerza me recorre y siento una explosión… me arrojo entonces al piso, arrodillada en cuatro patas otra vez, gritando “algo explotó”…Marcela deja la sábana, se levanta, mira el inodoro, me mira a mí, Pato está ahí y me toma de las manos junto con ella…y entonces sonriente me dice: “rompiste bolsa! Ya falta menos! Ahora es Jazmín la que quiere salir”…y me emociono, siento que lloro aunque no pude derramar lágrima alguna…me abrazan, Marcela, Pato…me acompañan al living…y llegan las parteras…siento el agua caerme entre las piernas…era Jazmín que me hacía a cada segundo más valiente, y por dentro mío estallaba todo lo que iba quedando atrás…sólo espero que llegue ella.
Mi pelvis danza, mi pelvis hace el amor
Sandra y Ana ya estaban ahí…me ofrecen el banquito para parto, me siento, pero no hay caso, y me voy nuevamente al suelo, me ofrecen una montaña de almohadas para descansar la cabeza…Ana se coloca delante de mí y le tomo las manos, me mira con firmeza, cariño y serenidad, me invita a respirar por nariz, a deformar los sonidos gesticulando con los labios… me tranquilizo, pero las contracciones se vuelven más intensas, le aprieto las manos y me sostiene…se acerca Marcela y me relaja con el rebozo…Ana me invita a mover la pelvis, y me animo…y muevo un poco hacia un lado y otro poco al otro, y me hace bien, y la muevo con más fluidez, y mi cabeza también…estoy danzando, a través del dolor, y me animo un poco más, y siento que es como si hiciera el amor, como el mismísimo día en que concebimos a Jazmín, y me muevo sin vergüenza, la mierda ya había salido y además, las niñas no paren, sino las mujeres… y estoy gimiendo, y mi pelvis se mueve ondulándose, y abro la boca y me siento libre, a través del dolor haciendo el amor, como engendrando a Jazmín…dándole forma, ojos, manos y corazón…qué hermosa sensación…empiezo a dejarme llevar por esa fuerza tan maravillosa, que una vez con mi amor nos hizo encontrar en una mirada, oliendo a Jazmín… soy una mujer pariendo, una mujer cada vez con menos miedo.

Besos en el agua
Ya está lista la pileta, deseo flotar, dejarme mecer en el agua cálida…entro, y me siento…un alivio recorre todo mi cuerpo…y lo veo a mi amor, que me mira tan tierno, y le sonrío feliz, y me hace un gesto de entrar, y le digo que sí…necesito sus abrazos, su cuerpo rodeándome, sus besos… mi sexualidad a flor de piel se potencia en el agua…y lo amo…primero se coloca a mi lado, y Ana le dice que me sostenga en su centro, y voy…y es hermoso…nos dejan solos…por unos minutos las contracciones se hacen más espaciadas, y nos miramos, me tira agua en la panza y en los pechos… nos besamos tiernamente, dulcemente…es encontrarnos en intimidad, es la dulce continuidad de nuestra sexualidad, ya no soy niña, soy mujer, con un hombre, y vengo a traer esta bebé, como el resultado del amor…sus besos me abren el alma, me relajan mis labios en mi vulva, vuelven las contracciones y el gime conmigo, y todo su cuerpo me dice que está entregado a este parto, a mí…confía, me acompaña incondicional…y yo lo amo.
Mi vagina es una rosa roja que se abre
Ahora las contracciones se intensifican aun más, por momentos recuerdo que no tengo idea cuánto dilaté, ni si falta mucho o poco, aunque intentaba averiguarlo, sabía que no era ese el camino a recorrer, sino hacia adentro, desde la intuición…Ana me dice que la sienta a Jazmín, que me conecte con ella…Sandra me sonríe, Marce me da kiwi en la boca entre cada contracción…por un momento notamos que la panza bajó mucho, en ese momento comprendo que Jazmín está muy cerca, y siento que el pubis me late!…para mi sorpresa era hipo! Hipo de mi bebé…todos reímos…y vuelve otra contracción y estamos todos a coro con la “o”, y le tomo las manos a Sandra y a Marce, y mi amor me contiene en su pecho…los gemidos comienzan a ser gritos muy profundos, desde la entraña…y les digo a las parteras que aun tengo más fuerzas…es que estoy tan segura de que no iré a ningún hospital, estoy realizando mi deseo más profundo…me ayuda el volver de cada contracción…sé que es eso, instantes de perderme en gritos dolor y rompimientos, y luego regreso, respiro, miro a mi alrededor, y los rostros son de amor, de emoción…Se me nubla la vista y visualizo mi vagina como una flor, una rosa roja abriéndose, cada vez más…y ya el dolor es más fuerte, aunque siquiera sé si llamarlo dolor, es la apertura de mi pelvis, es Jazmín abriéndose paso para nacer…
Abriéndome
“Jazmín salí por favor; dale, que te quiero ver y abrazar” y sonrío mirando a todos a mi alrededor…cada contracción que va viniendo me encuentra extendiendo brazos y piernas, abro mis manos para abrir mi pelvis, mi vagina…mi ser… “me estoy abriendo toda” grito, y entre llorar y sonreír sonrío…voy cambiando de posiciones, y veo a mi doula que está emocionada, y miro a mi amor y tiene también lágrimas en los ojos…y lo miro como la primera vez que nos miramos, lo miro confirmándole que esto es el resultado de nuestro amor, me lleno de su mirada, lo miro como lo miraría toda la vida, amándolo…diciéndole con los ojos que estoy trayendo a nuestra hija, que voy a poder, que todo está bien…y en la próxima contracción me aferro a las manos de Marcela y de Pato, y el grito es animal, y mi cuerpo se retuerce…y Ana me dice que toque a mi beba, y con un dedo llego a tocar su cabecita, que aun está dentro pero cada vez más cerca…y entonces vuelvo a mirar a todos, conmovida, sé que ya viene, sé que se trata de parir con amor, que la oxitocina está inundándolo todo, y me devuelven amor, y me siento feliz, y vuelve el animal, la hembra y sus alaridos…mis alaridos, mis entrañas, mi fuerza…y no se trata de hacer fuerza, me dicen que Jazmín va a salir, que ella va a salir, que la respire, que sienta su llegada…y yo la voy sintiendo, grito y me conmuevo, ya viene, y me aferro a mi amor y a Marcela, y Sandra que ya está preparada para recibir a Jazmín, y veo su sonrisa, y pareciera que me desvanezco embriagada… “el amor duele” dice siempre Marce, y este amor me partía… pero también me expandía, me ensanchaba, me ampliaba, me empoderaba…ahora escucho la voz de Marcela, me dice “ya está la cabeza afuera, agarrala Vicky, recibila vos” y Sandra me lo confirma, y llevo las manos y está su cabecita, y en la próxima respiración sale su cuerpito…ya está! Es Jazmín! Y la traigo sobre mi pecho, y no hay más dolor, no hay más gritos, no hay más que ella y yo…y la amo profundamente, y la miro, y abre sus ojos, y se queda para siempre en mí…nuestra primer mirada…y mi amor llora, y Marce y las parteras me dicen que es hermosa…y en mi espacio sólo quedamos ella y yo, y la beso…
La parí, renací…de tanto en tanto viene una brisa con aroma a Jazmín…nos envuelve…nuestras pieles son una para la otra… no hay más que su pequeño cuerpo sobre mí, la quiero cuidar…amamantar…pido a todos que me dejen con ella a solas…es nuestro momento, nuestra unión vital…somos las dos aun en el agua, un encuentro sutil hecho danza…puro amor.
El viernes 27 de septiembre nació Jazmín… rodeada de amor, de miradas cálidas, de respiraciones conjuntas, de manos acariciadoras, de comprensión…llegó llena de tiempo, de deseo y decisión… la parí con poder, elegí cómo hacerlo, me respeté y me respetaron, renací yo misma…la parí con Amor…17 horas seguidas sin ningún tipo de manoseo, sin presiones, sin anestesias ni inyecciones…de a poco nos fuimos encontrando, fue en el agua, yo abrazada a mi amor y de la mano de mi doula, hasta poder sentir su cabecita y recibirla yo misma, ponerla en mi pecho y mirarla, mirarnos, enamorarnos las dos…y no separarnos más…
SÍ, YO PARÍ CON PODER…COMO UNA MUJER EMPODERADA E INTUITIVA…PERO SOBRE TODO PARÍ CON AMOR…DI LUZ AL MUNDO, ME LLENÉ DE TERNURA Y CONFIANZA, EN MI MISMA, EN MI COMPAÑERO, EN MI DOULA, EN MIS PARTERAS, EN MI BEBA…Y ME SENTÍ UNA CON LA MADRE TIERRA, UNA CON TODAS LAS MUJERES DEL MUNDO…CON LAS QUE HAN PARIDO A TRAVÉS DE LOS SIGLOS, CON LAS QUE NO HAN PODIDO PARIR, CON LAS QUE HAN PARIDO VIOLENTADAS, CON LAS QUE AUN NO SABEN QUE TIENEN EL SABER Y EL PODER DE PARIR LIBRES Y AMADAS… PARÍ CON AMOR Y ME SIENTO ESPERANZADA, HOY MAS QUE NUNCA, DE QUE EL MUNDO Y LOS HUMANOS PODEMOS RENACER UNA Y OTRA VEZ…